El mundo emocional de los humanos es complejo , en mi opinión más complejo que las cogniciones.
Sus matices, colores y diversidad en el sentir, hace que su comportamiento no sea una ciencia exacta.
Al final es imposible separar emoción y cognición en el ser humano, están totalmente integrados.
Ser sólo seres racionales nos impide el conocimiento emocional
y si no lo conocemos no podremos responder de forma adaptativa ,
tomar decisiones,
ni resolver problemas en la dirección adecuada.
Nuestra cultura está impregnada por creencias y una de ellas es creer que emoción y cognición son nociones separadas.
Hoy día todas las investigaciones se dirigen a la contribución que han ejercido las emociones en las capacidades mentales.
Muchos opinan que las emociones y no la estimulación cognitiva contribuyen a los cimientos de la arquitectura mental primaria, así más que a interrumpir el pensamiento lógico, las emociones ayudan a mejorarlo.
Si todo esto se va esclareciendo,
¿porqué el sistema educativo actual
sigue poniendo su foco
en los procesos cognitivos
y no en los emocionales?
No hay razón ninguna más allá que pensar en un sistema caduco , que cada día se aleja más de la ciencia , los avances sociales y de sus integrantes principales como son niñ@s y educadores.
Pronto hablaremos del llamado “fracaso escolar” , cómo influyen las relaciones familiares, la frustración de los docentes y la ansiedad , estrés e irá de los escolares ……. el mundo emocional de nuevo presente.
Sin emoción , no hay cognición .